lunes, 30 de diciembre de 2013

La Duda de la Oruga

¡Feliz Navidad y próspero Año Nuevo a todos los que os pasáis por el blog! Aquí vengo a dejaros un nuevo poema que acabo de componer. Yo os recomendaría que lo leyerais escuchando alguna canción de Of Monsters and Men o algún grupo similar, pues lo he escrito mientras escuchaba canciones suyas, y creo que se ajustan muy bien a la atmósfera y los sentimientos que quiero transmitir con el poema. Sin más, aquí tenéis mi regalo de Navidad. Espero que os guste :)



La Duda de la Oruga

Vuelan, vuelan, vuelan.
Alas ingrávidas que surcan el cielo,
alas gráciles que descubren sueños.
Vuelan, vuelan, vuelan
delicadas mariposas de anhelos risueños.

La oruga espinosa, espinosa las contempla
desde la tierra congelada de invierno.
Sus diminutos ojillos brillando estériles
sobre la rugosidad perniciosa del suelo.
La oruga espinosa, espinosa espera y espera.

La oruga espinosa, espinosa espera
el momento que nunca llega:
ocultarse entre el follaje rubicundo,
segregar su sedoso pedúnculo,
inmovilizarse en una crisálida que destella,
y volver al mundo como la más pura estrella.

Las hermosas siluetas dibujan espirales
sobre su tosca cabeza de larva profana,
invitándola a unirse a esa coreografía
arbitraria que las mariposas bailan,
dueñas de sus vidas y ajenas al miedo
de abandonarse por completo
a las corrientes repentinas del viento.
Las hermosas siluetas descubren canales
vedados a la oruga espinosa y desconfiada,
que espanta a la desconocida simpatía asustada.

La oruga espinosa teme el mundo
retorcido y punzante que se le clava
inmisericorde y le abre llagas.
La oruga espinosa teme el mundo
helado, de troncos resbaladizos,
y tonos nebulosos y mortecinos.
Pues lo que la oruga espinosa teme
es el mundo que sólo percibir puede,
atrapada como está, desde la tierra inerme.

Mas es su ferviente anhelo tejer una hermosa crisálida,
dejar atrás esa vida estancada,
observando su vida que pasa,
sin nunca participar en nada,
y eclosionar al finalizar la metamorfosis orgánica.

Y volar a la luz iridiscente del día
transformada en etérea mariposa
para ser partícipe de sus sonrisas.

Pero el tiempo deshoja sus horas
pesadas cual lluvia plomiza de abril,
y la oruga espinosa permanece sola,
inmutable, inalterada y febril,
cuando el resto ya son mariposas.

Vuelan, vuelan, vuelan
en el cielo lejanas siluetas
de formas suaves y deliciosas.
Vuelan, vuelan, vuelan
en el cielo, lejanas y coquetas,
aladas criaturas armoniosas.

La oruga espinosa, espinosa las observa
desde el suelo áspero y yermo.
Sus diminutos ojillos brillando impotentes
ante el milagroso despliegue de refinados seres
que fluyen inabarcables en el universo.
La oruga espinosa, espinosa espera y espera.

Y se plantea, por fin, la duda dolorosa:
¿Será verdad que todas las orugas
se convierten al final en mariposas?

By: Kµ®£Nåi

domingo, 1 de diciembre de 2013

Es Otro Romance Más


Es Otro Romance Más

No.
No voy a ser en esta historia el buen samaritano,
ni el amante despiadado.
No.
Mío será el papel  del lector transparente,
que con tus fútiles charadas se entretiene.

"No conozco mejor amante que Morfeo,
y sin embargo, si por ti fuera,
no dudaría en permanecer cada noche despierto."

Tales palabras ambos contemplamos ascender por el aire,
donde en vaporosas volutas se convierten,
difuminándose en la brisa helada para siempre.

Adiós.
Lo sabías.
Adiós.
Lo sabíamos.
Adiós.
Conocías el silencio
de un adiós latente.
Lo sabías.
Adiós.

By: Kµ®£Nåi

jueves, 31 de octubre de 2013

Fantasmas

¡Hola de nuevo! Por fin me asomo al blog otra vez. Siento la tardanza, pero últimamente estoy demasiado ocupada y cansada como para componer. De todas formas, la espera ya  ha acabado, pues aquí os traigo un nuevo poema para que lo disfrutéis. ¡Espero que os guste!




Fantasmas

La niebla se alza en la soledad del páramo amortajado.
Horas silenciosas que se deslizan en vano.
Títeres amados de sonrisas clavadas al rostro
que ocultan puñales obviados por el ojo.
Giran las ruletas renqueantes del destino,
revelando el temido espejo dormido.

Sus iris desgastados, tercos y obstinados,
reniegan del reflejo, pero observan espantados.

Tras la desvaída silueta de su figura opaca,
surgen autómatas que se deshacen en nieve
y exhalan  miradas compactas e inertes,
que congelan el páramo y la pureza del alma.

Las miradas, concretas e hirientes,
dulces e indiferentes, se congregan
en el corazón del páramo nevado,
donde la tierra se agrieta, y pesan
en el fondo del erial extenuado.

Pasan sombras, se arrastran luces tenebrosas.
Surge entonces el diminuto brote del lirio,
incapaz de florecer en medio del caos y del delirio.
Vagan sombras, prenden exiguas antorchas.

Los iris arrasados, rotos y apenados,
se estremecen al contemplar el reflejo
inmisericorde que ahonda en el daño.

Una campana de cristal ha surgido en el reflejo,
sobre el brote de lirio blanco,
un refugio insospechado
para huir de la gélida negrura del hielo.

Las garras de tinieblas oprimen el vidrio,
mas, bajo la campana del lirio,
ya no pueden apresarlo sus cuchillos.
Y el tierno capullo aguarda su destino,
con la calma del que ya se sabe vencido.

Mas, bajo la opresiva penumbra reinante,
una tímida luz resplandece en lontananza,
llena de misteriosos halos y esperanzas vacuas.

Ella quiere correr hacia el horizonte,
y no se da cuenta de que escapa a la oscuridad,
una lágrima cayendo a perpetuidad
en la trampa que la sonrisa esconde.

Los iris agotados contemplan el reflejo,
que tiñe de miedo sus pupilas
y llena de escalofríos su cuerpo.

El brote de lirio derrotado en la oscuridad
del páramo, baila al son que los monstruos
le negaron, hasta que, temeroso,
se detiene al escuchar unos sollozos gritar
de pánico, y el capullo acobardado
recuerda por quién se halla doblegado.

Sombras que trasiegan.
Suspiros que envenenan.
Gemidos que anhelan.
Formas que parpadean.

Los iris devastados apartan la mirada
y  recuerdan que el espejo carece de realidad.
Despiertan a la refulgente verdad
y someten al reflejo que remueve el pasado.
Y descreen las difusas imágenes que solo muestran
sombras enjauladas que codician iris angustiados.

Son aquello que siempre los atormentará:
Fantasmas, envueltos en el manto del recuerdo.
Fantasmas, que cargan con su condena al cuello.
Fantasmas que martirizan su existencia en secreto.

Fantasmas, fantasmas, fantasmas,
terroríficos fantasmas.
Fantasmas que nunca han muerto.

 By: Kµ®£Nåi

miércoles, 11 de septiembre de 2013

The Lonely Cat

Hoy os traigo un pequeño pareado en inglés y en español (me gusta de las dos maneras). Siento no actualizar con poemas últimamente, pero me estoy centrando más en continuar la historia que tenía empezada y en otros relatos cortos que no puedo publicar aquí, ya que los voy a presentar a diversos concursos. Sin embargo, todo llegará. No os preocupéis. Ante todo, a mí lo que me gusta escribir es poesía y nunca, y mientras eso siga así, lo voy a dejar. 
Y ya sabéis, la paciencia tiene recompensa ;)




The Lonely Cat
There is a lonely cat sitting beside you,
and you haven't even noticed her chant.

La Gata Solitaria
Hay una gata solitaria sentada a tu lado,
y tú ni siquiera has percibido su canto.

 By: Kµ®£Nåi 

jueves, 8 de agosto de 2013

Polvo de Estrellas

Hoy, os traigo un microrrelato que escribí hace algún tiempo. Probablemente, haga de él un relato más largo, pero tiempo al tiempo.
Por ahora...


Polvo de Estrellas


—Polvo de estrellas... Somos polvo de estrellas— dijo, con los ojos bañados en luz. —Humanos atrapados en la tierra, perdidos y asustados, que ansían volver a ser estrellas.
Mas no había nadie allí para escuchar sus últimas palabras, y ella partió en soledad. Su mirada luminosa, prendida en el firmamento, y su corazón lacrimoso alzando el vuelo para no volver jamás.

-Fin-

By: Kµ®£Nåi