domingo, 6 de enero de 2019

Crueldad



Crueldad

La crueldad
es un ancla muy pesada.
Y me faltan manos para sujetarla.

¿Te correspondo yo,
como un resorte que salta,
o acaso no eres tú quien
lanzó la primera piedra,
la primera puñalada,
quien no pudo reprimir
su lengua sádica?

Ya no lo recuerdo.

Todo comienza en mí,
donde todo es inmenso
y vacío,
y la gelidez brota de la nada.
Y me aferro el pecho desnudo,
vanamente,
pues la hiel se destila en miedo
y el terror hace presa más allá
de las manos escarchadas.

¡No me toques!
¡No me mires!

No me rechaces,
te lo ruego.

Soy todo lo que tengo.
Lo único que tengo.
Te lo ruego.

La crueldad pesa y lacera,
mas nos hundimos
sin soltarla.

La crueldad es un muro de yedra
que nos devora
de los pies a la cabeza.